Todo está preparado en el Centre Court para una final que trasciende el título. Esta tarde, Carlos Alcaraz y Jannik Sinner se verán las caras por segunda vez consecutiva en una final de Grand Slam, y por primera vez lo harán con la gloria de Wimbledon en juego. Dos talentos generacionales frente a frente, en un duelo que confirma la consolidación de una nueva era en el tenis masculino.
Carlos Alcaraz, vigente campeón, llega lanzado. Acumula 24 victorias seguidas en hierba y busca el triplete en Londres, algo que nadie consigue desde que Federer encadenara cinco títulos entre 2003 y 2007. El murciano ha demostrado este torneo una madurez cada vez más completa, ha ganado con solvencia, ha sufrido cuando tocaba y ha sabido cambiar el ritmo en cada partido.
Al otro lado de la red estará el número uno del mundo. Jannik Sinner ha pisado firme durante todo el torneo y su victoria ante Djokovic en semifinales (6-3, 6-3, 6-4) es una declaración de intenciones. El italiano busca su primer Wimbledon y, de paso, vengarse de la derrota sufrida en la final de Roland Garros, donde llegó a ir por delante antes de que Alcaraz firmara una remontada inolvidable.
Será su decimotercer enfrentamiento, con ventaja para Alcaraz (8-4), que ha ganado los últimos cinco. Sin embargo, en hierba solo se han medido una vez y fue en 2022, donde ganó Sinner. Un dato que alimenta la intriga en la antesala de un duelo sin un claro favorito.
En lo táctico, el choque promete ser una guerra de estilos. La potencia y la limpieza de golpeo de Sinner contra la versatilidad, la imaginación y el instinto competitivo de Alcaraz. El italiano tratará de acortar los puntos y dominar con el servicio y el revés. El español, como siempre, buscará el desequilibrio desde la variedad y la presión constante.
Será también una batalla emocional. Sinner quiere demostrar que está preparado para mandar también en los templos del tenis. Alcaraz quiere confirmar que Wimbledon es ya su casa. En juego, el trofeo más deseado del circuito y, quizás, algo más: el liderazgo simbólico del tenis mundial.