El Real Murcia se marchó de Los Arcos con un empate a uno que supo a alivio. El Orihuela CF golpeó primero en la primera parte, cuando Solsona transformó un penalti que encendió a la afición local. Pero en la segunda mitad, Pedro Benito devolvió la igualdad desde los once metros, evitando así la primera derrota del verano para los de Joseba Etxeberria.
El duelo tuvo fases de dominio repartido. El técnico local, Pato, lo resumió así: “Hemos hecho un partido serio, con buenas sensaciones y fases de muy buen juego. Enfrente hemos tenido un señor equipo que nos ha hecho trabajar muchísimo”.
El estreno del delantero albanés Agim Zeka dejó un potente disparo al larguero que hizo temblar la portería visitante. El beninés Seyram volvió a contagiar su garra y capacidad de lucha, mientras que Matheus Cadorini vio cómo un gol suyo era anulado por fuera de juego. La estadística curiosa para los murcianistas sigue creciendo: cuatro penaltis en contra en cinco amistosos, un dato que da que pensar a menos de dos semanas para el inicio liguero.
Sobre la evolución del equipo, Pato señaló que “las conclusiones son todas positivas y seguimos trabajando para mejorar”, mientras que sobre uno de los protagonistas, Camilo, afirmó: “Ha estado espectacular, posiblemente el jugador más determinante en fase ofensiva que hemos tenido hoy”.
El Murcia ya piensa en su estreno en Primera Federación, con visita al Marbella FC, mientras Asier Goiria sigue trabajando para cerrar tres fichajes que apuntalen una plantilla cuyo objetivo no se esconde: pelear por el ascenso al fútbol profesional.