Los granas supieron aguantar la renta obtenida en el primer tiempo con un enorme despliegue físico durante el resto del encuentro
El Real Murcia se marchó al descanso con el primer tanto en el luminoso. El partido arrancó con sobresalto para el FC Cartagena. A los tres minutos, una pérdida en la zaga albinegra dejó a Ekain en disposición de firmar el primer disparo del encuentro desde fuera del área que fue a puerta, un aviso que confirmó el dominio inicial del Real Murcia. En apenas diez minutos, los granas forzaron dos saques de esquina que llevaron serio peligro sobre la portería de Lucho García.
La reacción cartagenera llegó a partir del cuarto de hora, aprovechando pérdidas murcianistas en campo rival. En una de ellas, Luismi encaró portería, pero Gazzaniga evitó el empate con una intervención providencial.
El primer gol del choque llegó en el minuto 17. Tras un centro de Flakus rechazado, Isi botó el córner con una rosca perfecta para que Héctor Pérez rematara por encima de Nacho Martinez en el segundo palo. La mala salida de Lucho García facilitó también el 0-1. El central con ficha del filial volvió a rozar el gol en el 25′ con un remate al palo en otra acción a balón parado.
El Cartagena generaba peligro cuando lograba robar y correr, pero sin concretar ocasiones claras. El encuentro se tensó en el 33′ tras un codazo sobre Flakus que dejó solo una amarilla como castigo tras ser revisado en el FVS. Los granas mantenían una presión alta que dificultaba la salida albinegra, aunque cada contra del Efesé llevaba sensación de peligro, como el remate de Diego Gómez tras un centro preciso de Perejón que se marchó arriba.
El tramo final del primer tiempo se convirtió en un ida y vuelta constante. El Cartagena ganó metros y presencia ofensiva, mientras que el Real Murcia, protegido por el gol de ventaja, se replegó a la espera del descanso.
Cambio de esquema grana con mayor repliegue
Tras el paso por vestuarios, el encuentro se reanudó con una batería de cambios. En los locales, Ander Martín y Edgar sustituyeron a Larrea y Diego Gómez. El Real Murcia respondía reforzando su estructura defensiva. Cristo entraba por Benito para ocupar el lateral izquierdo puro, dejando a Bustos en banda cambiada.
El segundo acto comenzó con sobresaltos. Flakus avisó en el primer minuto tras un despeje de la zaga grana, y poco después Kevin probó suerte desde la derecha, aunque sin acierto. El plan murcianista, muy definido, pasaba por una línea de cinco atrás y salidas rápidas al contragolpe, pero faltaba precisión en los metros finales.
El Cartagena, cada vez más volcado en busca del empate, rozó el gol en el 55′ con un potente disparo de Luismi, desviado por un defensor, se estrelló en el palo. Acto seguido llegaron nuevos movimientos en los banquillos. Juan Carlos Real y Sekou entraron por Ekain y Antonio David, mientras que en el Efesé, De Blasis relevó a Imanol Baz.
El partido se encendió en el 62’ con la entrada de Pedro León, que revolucionó al fondo murcianista y sustituyó a un exhausto Bustos, más dedicado a labores defensivas en la segunda parte. El equipo de Colunga, replegado y cómodo con el cambio de esquema, buscaba sentenciar al contragolpe.
Javi Rey quemó sus naves. En torno al 70’ dio entrada a Ortuño por Kevin y, en el 73’, a Calderón por Perejón, permutando extremo por lateral. Aun así, los granas mantuvieron su solidez, cerrando espacios y desactivando cualquier intento cartagenero, con un sobresaliente despliegue defensivo de todo el equipo y, en especial, del capitán Pedro León e Isi Gómez en medio campo. También aportó mucha frescura la incorporación de Sekou delante de los centrales.
El técnico asturiano agotó los cambios dando salida a Flakus para que Palmberg aportara control tras recuperación. El Real Murcia, sólido y disciplinado, aguantó hasta el final para adjudicarse el primer derbi de la temporada. Ambos equipos quedan igualados a 23 puntos, pero el triunfo impulsa a los murcianistas al cuarto puesto de la clasificación y mantiene al FC Cartagena en la 5ª plaza que marca el playoff. Ya son 16/18 puntos posibles desde que Adrián Colunga es entrenador grana.



















































